La Estirpe del Heraldo Wiki
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La Guerra de los Diamantes fue un conflicto civil que dividió a Angelia y que marcó el fin de la nobleza del imperio. Se libró entre 1440 aTA y 1442 aTA. Vio la muerte de dos emperadores y la extinción de numerosas casas ex-nobles.

Preludio[]

En 1401 aTA, el emperador Selatiel Lev Krizancius III fue coronado a los 14 años, tras la repentina muerte de su padre. Desde muy joven, tuvo que enfrentarse a muchos problemas como emperador, como la alta corrupción en el gobierno y la mala influencia de su medio-hermano y Arcapóstol del Alto Concilio, Zahur Krozznek. Estos problemas culminaron con el fallido Golpe de Arcangelum, evento que dió a Selatiel la fortaleza necesaria para tomar las riendas del imperio y buscar ser un buen líder.

Aún desde muy temprano en su reinado, Selatiel comenzó una serie de reformas sumamente progresistas para la epoca, que incluían la abolición absoluta de la esclavitud en el imperio y una mayor autonomía para las colonias. Estas decisiones fueron vistas por muchos como arriesgadas y controvertidas. Sin embargo, habían probado ser benéficas para el imperio a largo plazo. La última de estas reformas se llevó a cabo en 1440 aTA, cuando Selatiel, habiendo logrado conseguir el apoyo del Senado, destituyó al Sistema Nobiliario y expropió los puertos pesqueros, las minas y demás recursos que antes pertenecían a casas nobles y los puso bajo el control directo de la Corona. Esto, como era de esperarse, provocó una reacción sumamente negativa entre las casas ex nobles, a quienes, si bien se les permitió conservar sus fortunas, ya no controlaban condados, ducados o propiedades estratégicas para el imperio como anteriormente.

El Conflicto[]

Toma de Panormos[]

Días después de que el emperador Selatiel proclamara el fin de la nobleza, se creó una alianza de casas ex nobles, con el fin de resistirse a la decisión de la Corona. A la cabeza de esta alianza estaba la Casa Glizzok, encabezada por Lord Alastyr Glizzok. Esta familia tenía propiedad sobre las minas de diamantes ubicadas al este de la Provincia de Nyzvram, por lo que después de que un regimiento del Ejército Imperial llegará a las minas para tomarlas en nombre de la corona, Lord Alastyr se rehusó al control de la Corona y expulsó al regimiento de manera sangrienta. Casi inmediatamente, Glizzok, con el apoyo de las otras familias, amasó un ejército de mercenarios con el que se dispuso a tomar la ciudad de Panormos, una de las ciudades más importantes de la provincia. Con relativamente poca resistencia que hiciera frente al ejército mercenario, Panormos fue sitiado por diez días y posteriormente cayó bajo el control de las familias ex nobles, al momento que estas declararon abiertamente rebelión contra la Corona. Iniciando así el conflicto.

Batalla de Túmulo Rojo[]

Diez días después de la Toma de Panormos, los rebeldes ya poseían dos puntos estratégicos: La ciudad de Panormos y las Minas de Diamantes, y cada vez conseguían más adeptos. La Corona debía actuar rápido para evitar que el conflicto escalara a algo a nivel de todo el imperio. En Arcangelum, el emperador Selatiel sostenía que la crisis estaba destinada a ocurrir, y que una serie de victorias decisivas bastarían para poner a los rebeldes de nuevo en línea.

Los asesores militares de Selatiel consideraron que tratar de retomar las minas de diamantes era la mejor opción, pues tras la toma de Panormos, las defensas en las minas habrían de estar mucho menos fuertes. Fue entonces que se envió un regimiento de soldados a intentar retomar las minas por sorpresa. Sin embargo, los rebeldes previeron esto, por lo que planearon una emboscada en la que masacraron al regimiento imperial, cerca de una antigua tumba sephea conocida como Túmulo Rojo.

Esta batalla fue un fracaso significante para la Corona, y solo consiguió aumentar la figura de Glizzok como cabeza de la rebelión. Muchos consideraron la reacción de Selatiel como débil, pues esperó demasiado antes de ordenar otra intervención.

Un Nuevo Emperador[]

Poco más de un mes después de la Batalla de Túmulo Rojo, el emperador Selatiel Ang Krizancius III muere inesperadamente a los 53 años. Ya era sabido que por lo general los monarcas Krizancius no tenían una esperanza de vida superior a los 60, pero aún así, la muerte de Selatiel llegó en un momento muy delicado, pues para fortuna de los rebeldes, logró poner en entredicho la posición de la Corona en la guerra.

Selatiel tenía dos hijos, un par de mellizos: Kushiel y Haelle, de los cuales, el mayor y su heredero aparente, era Kushiel, quien, a los ojos de muchos, era más gentil y menos firme que su padre y hermana menor. A sabiendas de esto, los ex nobles lo vieron como una oportunidad. Ahora que un emperador visto como "débil" estaba en el poder, Glizzok lo aprovechó para escalar sus demandas a la corona. Los rebeldes cada vez ganan más adeptos, y cada vez más casas ex nobles se unían a su causa.

El primer acto del nuevo emperador Kushiel Sar Krizancius VI contra la creciente crisis, fue intentar un enfoque pacifista. Ofreció a los patriarcas de las familias rebeldes una indemnización aún más grande y un indulto por su insurrección a cambio de liberar las minas y las ciudades ocupadas, que ahora se habían multiplicado, cayendo múltiples asentamientos ante los rebeldes a lo largo de la frontera de Angelia con Anapat, y que ya no limitaba la influencia de los ex nobles solo a la Provincia de Nyzvram, sino también a la Provincia de Aalenn. Desde luego que los rebeldes rechazaron tajantemente la oferta de Kushiel, pensando que a estas alturas era imposible para la corona hacerle frente a la creciente rebelión. En un momento de ebriedad de poder, Alastyr Glizzok anunció a sus seguidores que la victoria contra la Corona era inminente, y se autoproclamó rey de una nueva nación, "una donde podría darle a las familias nobles la importancia y poder que los Krizancius no quisieron darles".

Batallas de Okkun y Mesa Rubí[]

Siendo que su acercamiento inicial había fallado, Kushiel estaba dispuesto a intentar un enfoque más asertivo. Aquí entró en escena la hermana del emperador, la princesa Haelle Sar Krizancius, quien además ostentaba el rango de General Brigadier en el Ejército Imperial. Ella era temida y respetada, pues era una excelente estratega militar.

Al enterarse de que Glizzok planeaban marchar a Tetras, capital de Nyzvram para tomarla y así establecer los cimientos de su nuevo reino, Kushiel encargó a su hermana encargarse de evitar que los rebeldes se volvieran un problema aún más grande de lo que ya eran para la Corona.

Haelle marchó a Tetras apresuradamente con tres regimientos del Ejército Imperial, esta estrategia fue osada para muchos, pues se consideraba que con tal número, no serían capaces de hacer frente a la hueste rebelde. Sin embargo, el objetivo de Haelle no fue una batalla frente a frente, sino una emboscada.

Puesto que Tetras estaba más cerca de Arcangelum que de Panormos, hubo tiempo suficiente para que el ejército de Haelle prepara la emboscada, se tomó como lugar clave un campo conocido como la Herradura de Okkun, que tenía un terreno cerrado, con solo una entrada, formando un pequeño valle con la forma de una herradura, el lugar era arriesgado, pues de estar adentro, el ejército tendría problemas al salir si eran atacados por la entrada, pero al mismo tiempo, posibilitaba un escondite natural, fácil de pasar desapercibido. Ahí se estableció un campamento falso, al mismo tiempo que información diciendo que el Ejército Imperial lo usaba como base de operaciones, se filtró intencionalmente a los rebeldes. Como era de esperarse, Glizzok subestimó a Haelle, y envió una significativa porción de su ejército a atacar por sorpresa el campamento imperial.

Haelle dividió su ejército en dos. Dejando una porción en Okkun mientras que otra se dirigió a donde Glizzok había dejado el resto de su ejército. Las tropas imperiales diezmaron exitosamente a los rebeldes en Okkun, en lo que se convertiría en la primer victoria de la Corona en la guerra. Al mismo tiempo, y tomandolos por sorpresa, la parte restante del ejército imperial atacó a los rebeldes estacionados en un punto estratégico a las afueras de Tetras llamado Mesa Rubí. La victoria fue aplastante en favor de la Corona, y Glizzok regresó a Panormos con casi una cuarta parte de las tropas con las que partió, y habiendo perdido una parte sustancial de su ejército total. Haelle regresó triunfante a Arcangelum, no sin antes establecer una fuerte defensa a lo largo de las ciudades de Naaz, Tetras y Oazis.

El Regicidio[]

Las derrotas en Okkun y Mesa Rubí prácticamente sellaron el destino de los rebeldes. La Corona, hasta ahora se había abstenido de atacar con todas las Fuerzas Armadas Imperiales a los rebeldes, por miedo a escalar el conflicto a todas las otras familias ex nobles sin alineación, pero ahora había logrado derrotarlos sin necesidad de una muestra de poder, sino una de astucia. Esta derrota enfureció a Glizzok, quien ahora había visto que intentar vencer a la Corona solo con fuerza bruta era inútil, por lo que comenzó a planear un contraataque más discreto pero aún más impactante.

Los rebeldes organizaron un golpe de estado en Arcangelum, que comenzaría con el asesinato del emperador y la princesa Haelle. Un par de asesinos armados con ballestas se ocultaron entre una multitud que presenciaba la llegada del emperador y la princesa a la Ciudadela Azul a bordo de un carruaje abierto. Los asesinos se posicionaron de tal manera que pudieran disparar simultáneamente a sus dos objetivos. El emperador Kushiel, alcanzó a ver al ballestero que apuntaba a su hermana, pero no se percató del que le apuntaba a él, que fue el que disparó primero, logrando asestarle al monarca un flechazo al cuello. Este, aún con la capacidad de moverse, se levantó de su asiento y logró interponerse entre el otro asesino y su hermana, recibiendo una segunda flecha en el costado del pecho.

Los asesinos fueron inmediatamente inmovilizados por la multitud y posteriormente arrestados por la Guardia Imperial de Sangre, que también dispersó a la multitud de la Plaza Krizancius. El emperador murió pocos minutos después en brazos de su hermana, la nueva emperatriz, cuyo primer acto como nueva monarca fue ejecutar a los dos asesinos en el acto. No necesitó interrogarlos para saber que Glizzok había sido el autor intelectual.

El emperador Kushiel Sar Krizancius VI murió ese día a los 33 años, y sólo tras 28 días de reinado, sin siquiera haber llegado a ser coronado en Trono del Ghekast. Fue el emperador con el reinado más breve en la historia de Angelia.

Las Batallas de la Venganza[]

Batalla de Krizan[]

Entre algunas de las ciudades que los rebeldes habían tomado, se encontraba Krizan, una de las ciudades más grandes del imperio y un punto clave de comercio en Angelia. Además de ser considerada la ciudad de los Krizancius, pues era de donde su fundador era originario y que hacía referencia al apellido de la familia.

Krizan fue el primer objetivo del plan de recuperación de Haelle Sar IV. Este plan consistía en desembarcar el ejército a lo largo de las costas de las provincias de Aalenn y Nyzvram, tomando las ciudades ocupadas de manera rápida. El primero de estos regimientos desembarcó en la ciudad portuaria de Parmis, que había logrado evitar cualquier invasión rebelde. Desde ahí, el ejército imperial marchó a Krizan

Batalla de Panormos[]

Consecuencias[]

Comienzo de la Purga Rebelde[]

Asalto a Colina Blanca[]

La Familia Verstandt[]

Reacciones del Alto Concilio[]

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